Share on facebook
Share on twitter
Share on whatsapp

Cámaras de seguridad controladas por Internet

Las opciones de monitorear la seguridad de nuestro hogar o de un local comercial han evolucionado. En esta nota conoceremos lo que nos ofrecen las cámaras IP para realizar seguimientos vía Internet 



Mantener nuestro hogar o nuestro comercio seguro es una necesidad para la cual
existen diversas soluciones.


Las cámaras de seguridad desde hace tiempo están presentes en el mercado y se
han adaptado a estas necesidades.

Pero como todos los productos, en el mercado
tecnológico, han evolucionado y también han aparecido nuevas alternativas para
poder monitorear nuestro hogar o un local comercial de nuestra propiedad.


Una opción económica y eficaz que se ha extendido para cubrir estos
requerimientos de seguridad llega de la mano de las
cámaras IP.

Con este
hardware podremos obtener imágenes de un lugar que deseamos monitorear, para
vigilarlo a distancia, ya que cuentan con la capacidad de conexión a una red
local o a Internet.


En esta nota aprenderemos sobre estos dispositivos que cuentan con excelentes
prestaciones.


El funcionamiento de las cámaras IP


Para comenzar a comprender qué son las cámaras IP, podemos pensar que estos
modelos son bastante parecidos a las
webcam que conectamos a nuestra computadora
para realizar videoconferencias.


¿Cuál es la diferencia entonces? Varias e importantes. Las cámaras IP no
requieren de una conexión directa a la computadora para funcionar, ya que pueden
ofrecer la posibilidad de acceder a la red y a Internet mediante Wi-Fi o cable
de red (Ethernet).


Estas cámaras cuentan con un CPU integrado en su interior, tienen capacidad de
compresión de imágenes y algunas características que le brindan mayor potencia
que a las webcam habituales.


Luego de instalada, la cámara IP puede ser manejada de manera remota, a través
de la red o por medio de Internet (en cualquier lugar donde nos encontremos).

De
esta manera podremos ver imágenes secuenciales o el video de lo que está
ocurriendo en el lugar monitoreado. También existen modelos con capacidades de
audio integradas.


Las características de las cámaras IP


Ahora que sabemos cómo funcionan básicamente las cámaras IP, nos adentraremos en
las características principales a tener en cuenta en estos dispositivos.


Un aspecto que resultará importante es la resolución. Los modelos actuales
pueden arrancar en 320x240px o 640x480px.

La tasa de cuadro por minuto se puede
medir en FPS. En la mayoría de los casos, puede resultar suficiente si nuestro
modelo puede capturar entre 24 y 30 cuadros por segundo.

El video viaja
comprimido con los estándares que luego serán interpretados sin problema la
computadora o el dispositivo que utilicemos para visualizar.


Otro factor para tener en cuenta es la posibilidad de que el dispositivo pueda
capturar y transmitir el audio ambiente, para tener un panorama completo de lo
que está ocurriendo en el lugar monitoreado.


Si deseamos ver secuencias de imágenes en intervalos de tiempo definidos,
podremos obtener las capturas en JPEG. Esto puede ser transmitido para ser
visualizado mediante una aplicación específica, el navegador web o bien ser
enviadas por correo electrónico.


Otras características específicas que podemos encontrar en algunos modelos de
cámaras IP son: detector de movimiento, sensor de barrido progresivo (para mejor
calidad de imagen), video inteligente (para definir cuando enviar el video o las
imágenes), protección para ataques informáticos maliciosos (encriptación SSL/HTTPS),
capacidad de actualización de firmware (para cargar las últimas actualizaciones
del fabricante en el firmware de la cámara).


Otra función que puede resultar de gran ayuda para monitorear ambientes con poca
luz, es la de visión nocturna (Nightshot) o el uso de LEDs IR para infrarrojos.

Según la calidad y características del dispositivo empleando alguna de las
tecnologías de visión nocturna, es posible ver a distancias de entre 10 y 20
metros. Obviamente, en este sentido también influirán las características del
espacio donde se esté realizando el monitoreo.


En lo que se refiere a audio, puede ser muy útil que el dispositivo incluya
micrófono y audio de dos vías, para poder escuchar y también hablar, si fuera
necesario, a través del dispositivo.


El ángulo de movimiento del dispositivo de captura de imágenes también puede ser
importante si necesitamos que la cámara realice tomas sobre diferentes lugares
del ambiente. Existen modelos con capacidad de giro de 270º (horizontal) y 120º
hacia arriba y hacia abajo (vertical).


Algunos modelos más avanzados también incluyen funciones de interconexión con
otros dispositivos de seguridad (generalmente con sensores) y también
posibilidades de expandir sus características.


Palabras finales


Las cámaras IP son ideales para monitorear un lugar, a bajo costo y con muy
buenas prestaciones. Podremos realizar la verificación en cualquier sitio que
nos encontremos, siempre que tengamos una computadora o un dispositivo
compatible con capacidad de conectarse a Internet.


Estos dispositivos pueden resultar de gran utilidad tanto para monitorear un
local comercial, una oficina, nuestro hogar cuando no estamos o bien la
habitación de los niños o del bebé.


Para finalizar, vale decir que sus dimensiones son reducidas y eso hace que sean
fáciles de ubicar en cualquier rincón que deseemos.

Si el modelo elegido cuenta
con características Wi-Fi, esto simplificará su conexión y la versatilidad para
no tener que realizar largos tramos de cableado. Por esta razón es una
alternativa altamente recomendable si tenemos cobertura Wi-Fi, en el lugar donde
ubicaremos la cámara.