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¿Cuánto cuesta ser padres?

Consejos prácticos para manejar las finanzas cuando nace un bebé



Pasar de mantener tu hogar con dos sueldos a hacerlo con uno solo no siempre es
sencillo, aunque lejos está de ser imposible.

Sí, puede tomar algo de tiempo
adecuarnos a este nuevo sistema, pero, en definitiva, es uno más de los tantos
ajustes que deban hacer los flamantes padres.


Antes de proseguir, ten en cuenta que en muchos países el hecho de convertirte
en padre te da derecho a una asistencia por parte del gobierno.


Para facilitar la transición, vale la pena planificar de antemano cómo van a
manejar su presupuesto luego del nacimiento en lugar de esperar que éste se
acomode por arte de magia.

Debes ser muy claro al diagramar la transición a un
único ingreso, y la forma en que esto va a cambiar tu vida.

Es hermoso que uno
de los padres se quede en casa con el bebé, pero si las presiones financieras
hace que sus vidas se vuelvan miserables, entonces será mejor que volver a
trabajar antes de lo previsto.


Una de las mejores formas de evaluar cuán bien podrás sobrevivir con un ingreso
es hacer un ensayo antes de que tu esposa inicie su período de licencia.

Sin
dudas, acomodarse a un único cheque de paga será dificultoso. El proceso puede
generar altos intereses por deudas de tarjeta de crédito e incluso podrías
retrasarte con los pagos de tu préstamo hipotecario.


Si estás planeando, digamos, seis meses o más de licencia parental, deberías
extender tu experimento de vivir con un sueldo durante el mismo lapso de tiempo.

Esto, además, te dará la posibilidad de hacer algunos ahorros. Comienza tu
experiencia haciendo una completa revisión del presupuesto familiar y
adecuándolo a un solo ingreso salarial.


Recuerda, durante este período no tendrás el beneficio de cualquier asistencia o
pago gubernamental. No obstante, es posible que quieras ablandar algo las reglas
e incluir una cantidad igual al beneficio anticipado desde tu segundo ingreso o
salario.


Aprovecha la oportunidad de usar tu segundo ingreso en forma inteligente.
Efectúa reembolsos extraordinarios para reducir deudas y deposita tanto como
puedas en una caja de ahorro de alto interés.


Ahora que todo corre bajo un presupuesto que se nutre de un único salario,
discute la experiencia con tu pareja. ¿Es frustrante? ¿Es más fácil de lo
esperado? ¿Qué sacrificios debieron hacerse?

¿Fueron capaces de adaptarse al
cambio? ¿Qué se perdió? ¿Qué se extraña? Seguramente ambos extrañarán cosas de
su anterior estilo de vida, sobre todo si no andaban reparando en los gastos. Y
entonces es cuando la experiencia puede convertirse en alto tortuoso.


Si es este tu caso, entonces tal vez deban revaluar el período de
licencia por
maternidad
, o considerar alguna posibilidad de trabajo desde casa una vez que el
bebé haya nacido.

Separando el dinero


Una de las dificultades de los padres que no trabajan es encontrarse con la
ausencia del ingreso propio, una vez finalizada la licencia paga.

Tener que ir
con la mano extendida al compañero, o lo que es peor, tener que justificar los
gastos, puede en algunos momentos generar descontento.

Y encima de todo, dado
que solemos confundir el
dinero con el poder, quien deba ocuparse del bebé
podría sentir que ya no tiene el 50% en las decisiones, y menos en aquellas que
impliquen importantes sumas de dinero.


A no alarmarse, existe un buen número de formas de mantener las finanzas en
forma conjunta.


Sus cuentas bancarias pueden ser una herramienta útil para dividir el único
ingreso en partes iguales y de esta manera evitar disputas y maximizar la
armonía marital. Si bien existen sólo dos tipos de cuentas básicas (personal y
conjunta), hay varias formas de compartir.


Si van a compartir en forma no proporcional, el ingreso por paternidad deberá ir
a la cuenta del padre que se queda en casa, mientras que el principal ingreso
irá a la cuenta del padre trabajador.

Cada uno contribuirá con una porción de su
ingreso a una cuenta conjunta para cubrir los gastos diarios. Este sistema le da
a cada padre algo de dinero en efectivo para usar a su antojo.


Sin embargo, dado que con algo de suerte el dinero que va a la cuenta del padre
en actividad será mayor al de la cuenta del que se queda en casa, el sistema
podría generar algo de resentimiento sobre quién dispone de más dinero para
gastos personales.


Si éste es el caso, entonces lo recomendable será combinar todos los ingresos,
tanto los destinados al mantenimiento del hogar como los destinados a los gastos
personales, en una única cuenta.


Si piensan compartir en forma proporcional, una cantidad establecida debe ser
destinada a una cuenta conjunta para cubrir los gastos básicos del mantenimiento
del hogar.

El resto se dividirá en formas iguales en dos cuentas personales para
el ahorro o el gasto arbitrario e independiente.

Mantener varias cuentas implica
aranceles bancarios extraordinarios, pero de todas formas puede resultar
conveniente para preservar la independencia y el bienestar entre los miembros de
la pareja.


Más allá del abordaje que adoptes, es importante que ambos miembros de la pareja
estén al corriente de las finanzas del hogar.

¿Están listos?



Puede que sean una pareja lista para tener hijos, pero ¿están listos para
resignar un sueldo? ¿No tendrás problemas en ir a pedir dinero a tu marido o
esposa?


Para evitar inconvenientes, acuerda que tu pareja transfiera parte de su paga
semanal a tu cuenta bancaria. Usa este dinero para los gastos de escuela,
excursiones, uniformes, el cuidado diario, y cualquier otra cosa que el chico
pueda necesitar. Ocasionalmente gasta parte de este dinero en gustos y placeres
personales.


Con el resto del dinero, la otra parte de la pareja se ocupará de las otras
cuestiones. En la mayoría de las parejas hay un integrante que asume la
responsabilidad de manejar las cuestiones monetarias importantes.

Si el cuidado
del chico recae en tus manos, puede ser tentador dejar que tu pareja se
convierta en el rey absoluto del plano financiero. No obstante, esto puede
salirte caro.


Todos los matrimonios terminan en forma inevitable, ya sea por muerte o
divorcio, y al menos que tengas una noción sobre los aspectos financieros de
relevancia, como cuando se debe de la hipoteca o cuándo se vence la cobertura
del seguro, podrías quedar en una situación descolocada.

Conoce tus derechos


Existe un rango de beneficios gubernamentales a los que las familias con chicos
pueden y deben acceder. Por lo general, será necesario adquirir los formularios
para aplicar a estos beneficios al momento de abandonar el hospital después del
nacimiento del bebé.


Asimismo, son varios los puntos que merecerán nuestra atención. El primero es
que para aplicar a los beneficios, deberás tener tus asuntos impositivos al día.
En consecuencia, procura saldar tus deudas con el fisco y poner en orden tus
conflictos con anterioridad.


El segundo punto a tener en cuenta es que tu derecho a muchos de estos
beneficios se basa en el estimado de tu ingreso anual, de modo que deberás
facilitar este dato a la oficina de asistencia familiar (o el equivalente en tu
país).


Cada año, después de haber presentado tu declaración de ingresos, se te
solicitará que cuadres cualquier sobre-pago, y esto puede resultar difícil para
las familias que ya han gastado el dinero.

Pago por maternidad


Si en tu país el gobierno realiza pagos por maternidad por única vez, y si el
monto es considerable, será adecuado hacer un buen uso de tu dinero. A
continuación, algunas maneras de aprovechar al máximo tu dinero:


·

Inviértelo para la educación de tus hijos. Esta suma puede convertirse en el
pilar de la futura educación de tu hijo si lo inviertes al momento de nacer.

No
pongas el dinero en una cuenta que genere intereses, puesto que ganarás migajas.
En cambio, invierte en acciones para obtener un crecimiento de capital y
ingresos regulares con baja carga impositiva.


·

Cancela algunas deudas. Usar el dinero para saldar deudas puede generarte
grandes ahorros en concepto de interés. Suponiendo que la paga sea de $4133,
realiza un pago a cuenta de tu préstamo de vivienda. Sobre una hipoteca de
$250.000, podrías terminar ahorrando $20.405 en intereses.


·

Realiza algunas pequeñas reparaciones antes de que se conviertan en grandes
gastos. Posponer los reparos menores hasta que se conviertan en verdaderos
destrozos y contratiempos, es un verdadero error desde el punto de vista
financiero.

Por ejemplo, con el bebé a bordo, en verdad vale la pena gastar
parte del pago por maternidad en un servicio completo para el auto, incluyendo
la revisión de seguridad. Negar los problemas menores puede afectar la seguridad
y el valor de tus activos.

Prestación para padres y exenciones impositivas



Los padres pueden también calificar para la prestación para padres, salario
familiar o asignación por hijos, pero tal vez lo mejor de vivir con un solo
ingreso sea que los padres pueden disfrutar de algunas importantes exenciones
impositivas, dependiendo de tu país de residencia.


Estas exenciones impositivas son particularmente útiles para aquellas parejas
con inversiones, especialmente depósitos en efectivo (recuerda que los intereses
están sujetos a impuestos), que pueden ser puestos a nombre de la persona con
bajos ingresos.


Digamos, por ejemplo, que María y Pablo tienen un depósito a término de $20.000,
que gana un 5% ó $1000 de intereses al año.

Si el salario anual de Pablo es de
$85.000, su tasa impositiva personal mínima sería del 40%, de modo que si el
depósito está a su nombre, Pablo pagaría el 40% o $400 sobre el interés.


María se queda en casa para cuidar de su bebé y no recibe otro ingreso. Si la
inversión está a nombre de María, la pareja no pagará impuestos sobre el
interés, obteniendo los dividendos completos de $1000.

Este ejemplo sirve para
destacar la importancia de decidir con inteligencia a nombre de quién sostener
las inversiones cuando uno de los miembros de la pareja está desocupado. En
cualquier caso, es una decisión que debe tomarse antes de invertir.


La oficina de impuestos permite la transferencia de ciertos activos, como las
acciones o unidades en un fondo de gestión activa, de un integrante de la pareja
a otro en forma de venta de la inversión.

Puedes vivir con menos


Seamos realistas, no es fácil pasar de vivir con dos ingresos a hacerlo con uno
solo, especialmente cuando tienes una boca extra que mantener.

Pero quedarte en
casa para cuidar de tu bebé te da tiempo de ocuparte de ciertas cosas por las
cuales deberías pagar en caso contrario (como las tareas domésticas, desde la
limpieza a la jardinería).


Si ahora que estás con tu bebé no puedes soportar el pensamiento de regresar al
trabajo, evita concentrarte en el sueldo que estás resignando y comienza a
pensar en cuánto puedes ahorrar.

Vivir con un solo ingreso puede ser un objetivo
más realizable de lo que crees. Y si las finanzas familiares se están poniendo
complicadas, siéntate con tu pareja y determina cuáles son las áreas en las que
pueden trabajar juntos para recortar gastos.


Mantener una historia crediticia sólida siempre debe ser la prioridad, de modo
que si los pagos de tus deudas se están haciendo problemáticos, habla con tus
acreedores antes de perder un pago.

La mayoría intentará acomodar un plan de
pagos, sobre todo si cuentas con un buen historial. Con un poco de
planificación, contar con un ingreso menor no debería convertirse en una excusa
para disfrutar menos de la vida.